Feb 15, 2010

Las Hipótesis de Calderón…

Con las manos temblorosas y un rostro tieso seguramente por la clase de “regañada” de la que había sido objeto momentos antes por la madre de dos de las víctimas de la masacre de hace unas semanas en Cd. Juárez, Calderón en su afán de parecer importante e incluso interesado en lo que pasa en esa ciudad del norte del país, sólo atino a desnudar la realidad de su estrategia contra el narco que nos ha llevado a una guerra sin cuartel en todo el país y que le ha costado a los juarenses miles de vidas, su tranquilidad y a muchos estoy seguro , prácticamente la esperanza.

El jueves 11 de febrero todos los que escuchamos su discurso frente a los juarenses, usando la palabra hablada dentro del salón y con toletes y armas desenfundadas en las afueras del centro de convenciones, nos enteramos de una vez por todas que Calderón, no solo usurpo la presidencia de la república robándose la elección del 2006, sino que nos llevo a la guerra en base a una hipótesis (¡?), a su hipótesis (así, tal cual) de cómo opera el narcotráfico y como opera el crimen organizado en México.

Detrás de su guerra contra el narco al parecer no hay estudios objetivos, no hay experiencia nacional o internacional que cuente. Lo que existe y se sigue a rajatabla es la hipótesis del señor Calderón. Se dirigió a los juarenses argumentando que el desastre que viven, se debe a que, según su hipótesis, los narcos tienen presa del terror a la sociedad mexicana debido a que han encontrado una fuerte demanda interna de droga (quizá habrá que darle algún tipo de crédito a su hipótesis ya que desde el inicio de “su guerra” el consumo de cocaína se ha incrementado notablemente en el país) y ahora en vez de buscar ser “invisibles” en su tráfico de drogas a los Estados Unidos se pelean las plazas mexicanas a plena luz del día y a balazos (y por supuesto, pobre del que se atraviese en el fuego cruzado). Así de simple, los narcos se pelean las ciudades donde viven los mexicanos que se drogan gracias a su “creciente poder adquisitivo” y entonces ay que sacar al ejercito a las calles, porque como los pistoleros de los narcos usan armas de alto calibre y hay que agarrarse a balazos con ellos, porque según la hipótesis no hay de otra, pues que mejor que la potencia de fuego del ejército (¡?). Esa es la hipótesis, bala por bala, muerto por muerto hasta que alguno de los dos bandos desaparezca. Que se están llevando entre las patas al estado y la sociedad mexicana? Al parecer ese detalle no es importante dentro de la hipótesis de Calderón.

Pero lejos de esta hipótesis que da una explicación del fenómeno tan a medias, como suelen darlo las hipótesis, y buscando ser objetivos, como se supone deberían ser las políticas de estado, cabe preguntarse varias cosas. Por ejemplo; y la marginación de las grandes mayorías en este país, no contribuye esto al problema?, y la falta de empleo que deja en la miseria a millones, no contribuye también?, y la falta de educación para los jóvenes a todos los niveles aunada al bajísimo nivel de la que se imparte, que parte juega en el problema?, y la terrible corrupción gubernamental de la que el señor Calderón es parte fundamental y protagónica, no es acaso este el caldo de cultivo de la impunidad que padecemos? La hipótesis plantea que el narco se pelea el mercado interno, acaso no es Cd. Juárez una ciudad fronteriza donde los carteles se pelean a muerte el cruce al mercado estadounidense?? Ahora resulta que pagamos las consecuencias de nuestra “inusitada riqueza” que nos da acceso al mercado de la droga?? Mejor preguntémonos quien se beneficia de los millones de dólares que se generan con este negocio, a dónde se va el dinero de la industria de la droga?. Son los picaderos de Juárez centros de reunión de la amplia y vigorosa clase media mexicana con sus “valores cristianos” ya muy adormilados? Cual clase media mexicana si están a punto de desaparecerla? Y si hablamos de valores; qué valores promueven lo grandes monopolios televisivos que impulsaron la imposición de Calderón en la presidencia? Hay en el país cerca de 7 milllones de “Ni-Ni’s”, consecuencia de un modelo económico fallido que el señor Calderón y su desquiciado gabinete defienden contra todo y contra todos, no es acaso la desesperanza generada por este modelo un caldo de cultivo para la violencia y la desintegración social? Porque hasta ahora se da un asomo de un programa integral, que incluye la importantísima vertiente social contra el crimen organizado? Seria porque no era parte de la hipótesis del señor Calderón hace dos años? Porque la gran mayoría de los juarenses no le creen a Calderón? Sera porque no durmió en Cd. Juárez el jueves pasado? No confía en la potencia de fuego del ejército a su mando? El mismo que reprime a los manifestantes mientras a unas cuantas calles aparecen ejecutados y como siempre, nadie hace nada.

Es evidente que el país necesita más que simples hipótesis para ser rescatado del hoyo en el que lo han sumido diez años de políticas desquiciadas emanadas del PANismo. Los que ahora nos demuestran que al parecer solo llegaron a Los Pinos para acabar de destruir lo que el PRI no pudo destruir en su tiempo. En cuanto a las jornadas juarenses de Calderón, estas se podrían resumir con esta frase; “el principio del fin”.

O.V.F